miércoles, 21 de julio de 2010

CUATRO SOLUCIONES A UN MISTERIO

SEGUNDA PARTE


La puerta se abrió y llegaron Alex y Paula
¡Hola! Venimos a contaros que la policía tiene acordonada la arboleda de detrás de la casa de Srta. Natalia y al parecer han encontrado una gran cantidad de papeles rotos, quizás sean documentos.
-Antonio se dirigió a ellos y le dijo ¡si tenéis mas noticias venir pronto!
-¡Hasta Luego! Se despidieron Alex y Paula
- Sara exclamó-esto echa por tierra las especulaciones anteriores, pues ninguno ha mencionado en su relato ninguna clase de documento.
-Pero esto no implica el que no fueran robados algunos documentos-Dijo Antonio.
-Bueno Sara, te llegó la hora, espero que tu relato sea mas convincente.
-Sara hinchó el pecho, se atuso el pelo, alisó su falda y luego de un carraspeo, empezó con voz tan queda que todos empezaron. ¡Más alto!
-Todos conocemos a Germán, el de la pequeña naviera, en tiempos dicen que fue un gran personaje de los negocios y que alternaba con gente de la más alta escala social, pero no se sabe como llegó aquí ya que era una persona que lo tenía todo, dinero, poder e incluso era muy bien parecido y gustaba a las mujeres.
-No es normal que un personaje así venga a recluirse en un pueblo que podíamos calificar casi de fantasma,
-Mi teoría es la siguiente- Germán por algún motivo tuvo que huir precipitadamente y esconderse en este pueblucho. Camufló sus pertenencias, se hizo pasar por un pequeño empresario y tomó un nuevo nombre con el animo de pasar desapercibido de todas las amistades anteriores, ya que en una buena jugada había vendido un gran paquete de acciones a espaldas de dos de sus socios, creo que eran portugueses, y salió huyendo sin participar a sus socios las sustanciosas ganacías que habían recibido. Estos al verse estafados y no siendo gente que dejaran cabos sueltos lo buscaron.
-No obstante Germán no estaba demasiado intranquilo, primero porque se pensaba a salvo en este pueblo y después porqué por precaución tenía guardados documentos muy comprometedores para varias personas muy influyentes y entre estas estaban sus socios.
-Alguien contrató a dos matones para vinieran aquí mezclados con los pocos turistas que de vez en cuando se suelen ver. Estos vigilaron día y noche a Germán, pero no pudieron dar con los documentos que les había encargados.
Viendo que se prolongaba la estancia en el pueblo y la gente podía empezar a sospechar, se les ocurrió secuestrarlo. En su propia casa le esperaron y sin darle tiempo a reaccionar le maniataron y empezaron a vapulearlo para que les dijera donde se encontraba los citados documentos.
Germán no es un héroe y al segundo golpe ya había dicho todo sobre la documentación. Pero todo estaba en contra de Germán dio la clave de la caja fuerte y los dos matones la abrieron y sacaron sin dilación todos los documentos que encontraron, pero a Germán con el miedo se le había olvidado que su caja fuerte estaba conectada a la red de la policía. Al sentir los delincuentes la alarma sus ojos echaron chispas y su instinto les decía que tenían que huir, pero uno de ellos lleno de rabia se volvió hacía Germán y clavó su arma varias veces hasta que vio que este había dejado de respirar.
Como no conocían bien el entorno corrieron sin dirección y cada vez se sentían más cansados por el peso de la gran cantidad de documentos.
Cuando llegaron tras la casa de la Srta. Natalia anochecía pero en la arboleda empezaron a revisar los documentos ya que solo les interesaban los que habían ido a buscar y el resto para ellos solo era una cargar hasta encontrar el coche.
Por supuesto se dieron cuenta de que una prenda estaba manchada de sangre, no les importó mucho ya que en el coche tenían mas en la maleta y además al secuestrar a Germán habían tomado la precaución de ponerse guantes, la policía no encontraría huellas ni el arma ni los documentos, por supuesto pensaban que al ser matones a sueldo y desconocidos en la ciudad contaban con que nadie les relacionaría con la victima.
-Lucía rápidamente se dirigió a Sara y le dijo-¡Oye! ¿y las maderas, de donde han salido?
-Esta claro-dijo Lucas- que todas las teorías hasta ahora expuestas fallan en algunos puntos.
-Bueno refunfuñó Sara, también podían haber cogido las maderas por algún motivo.
Como os dije-habló Antonio, especular es facil pero acercarse a la realidad es mucho más difícil.
-¡Hola! ¿Como anda la tarde? –dijeron Laura y Tomás, saber que toda la pandilla andamos por el pueblo recabando datos para vosotros y hemos quedado en venir después para ver quien se ha acercado más al verdadero suceso.
Casi a la vez todos miraron a Antonio y con la mirada comprendió que le tocaba a él empezar a especular.
CONTINUARA.....

sábado, 3 de julio de 2010

CUATRO SOLUCIONES A UN MISTERIO


- PARTE PRIMERA-


La comida está servida-dijo Antonio, pero nadie se dio por enterado ¿Quién en aquella sala no estaba muy atento a lo que narraba Sara?


La casa parecía un hervidero, todo el mundo entraba y salía y alrededor de Sara un grupo numeroso parecía fascinado por lo que la joven les relataba.
¿Chismes del pueblo? No, al parecer se había producido un accidente muy raro, habían encontrado unas ropas ensangrentadas cerca de la casa de la señorita Natalia la maestra del pueblo y después de rastrear incluso encontraron un cuchillo con restos de sangre.

Aquello espantaba a los oyentes y no dejaban de preguntar ¿a quien pertenecían? y si la policía ya contaba con algunas pistas.
Sara se dejaba querer y contaba las cosas con mucha calma recreándose en los detalles, mientras pensaba…. pocas veces tendré a tanta gente pendiente de mí y mi minuto de gloría pronto pasará.
Antonio se unió al grupo de gente donde esta Sara y empezó a escuchar, pese a que le interesó (en el pueblo nunca pasaba nada fuera de lo normal) no se hacía ilusiones ya que pensó que no era para tanto y que pronto se descubriría el misterio y seguro que no tendría importancia ¿quizá alguien habría sacrificado algún animal?

-¿Bueno por fin comemos?- dijo Antonio
Sara le miró con ojos furiosos, pero Antonio no se dio por enterado y repitió.
-¿Comemos por fin?
El grupo se deshizo y empezaron a tomar posiciones informalmente en las sillas.
Lucía pregunto:

-Antonio ¿Qué te ha parecido lo que cuenta Sara?
-Pues que no es nada del otro mundo
-Oh...exclamó Sara
-Bueno tengamos la fiesta en paz tercio Lucas.
-Mirad de cualquier situación se puede hacer mil especulaciones, si quereis cuando terminemos de comer podemos pasar el rato jugando a especular sobre este tema, cada uno podrá inventar una versión que considere la mas ajustada a la verdad ¿os parece bien?
-Bien, estupendo, me apunto – dijo Lucia.
-No está mal para pasar la tarde exclamó Lucas.


Se oyeron varias voces disculpándose, porqué ya tenían otros compromisos para esa tarde.
--Antonio se dirigió a Sara y le preguntó ¿ y tu te apuntas?
-Sara con cara de enfado dijo, bueno… la tarde esta lluviosa y no tengo nada que hacer.

Durante la comida no se volvió a hablar del tema y todos hacían planes para las próximas vacaciones. Las actividades allí eran pocas y había que aprovecharlas. Varios propusieron hacer excursiones a poblaciones próximas y todos se quejaron del poco dinero del que disponían para pensar en planes más ambiciosos.
Marco propuso alquilar una autocaravana en una empresa muy próxima a la casa cerca de la carretera. Algunos adujeron que el dueño era un avaro y que sería difícil convencerle para que les concediera a crédito el alquiler. Después de sopesar varias opciones se sintieron frustrados ¿otro verano perdido?
No podían permitirse pasar otro verano como los anteriores, debían poder encontrar algo que les sacara de la monotonía de siempre.
-Aurelio de pronto dijo se me ocurre algo, este año es la campaña electoral, podíamos ganar algo de dinero ayudando y alquilar la cabaña junto al río, decorarla a nuestro gusto y dar fiestas sin que nadie nos moleste.
-Sí, pero siempre seremos los mismos, pura rutina- dijo Laura.
-No,-contestó Aurelio- porque podíamos invitar por unos días a gente de la universidad, seguro que vendían encantados, sobre todo si les resulta casi gratis.
-¿Alguien aporta alguna idea para este verano?
Un murmullo es lo que se escuchó pero en verdad nadie tenia mejores ideas sobre tan delicado tema.

Muchos empezaron a despedirse, pero prometían escapar de sus compromisos para ver como se desarrollaría la pugna y que especulación ganaría y se ajustaría más a la verdad.
La casa empezó a despejarse solo quedaron Lucia, Sara, Antonio y Lucas.
La tarde s presentaba larga y aburrida y la conversación se cortó de repente. Afuera empezó a caer una fina lluvia que languideció aun más a los presentes.

Recogieron la mesa y pusieron encima del mantel café recién hecho y buscaron por la cocina algún resto de bebida, solo encontraron un poco de brandy, pero no era cosa de despreciarlo.
-Alguien debería empezar ya, comentó Antonio ¿por qué no empiezas tu Sara?
-¿Yo? ¿Por qué yo?
-Tú has sido la que con tus explicaciones has dado pie a esta reunión.
-Es que…así…de pronto.
-¡Está bien – terció Lucia- empezare yo. La casa de la señorita Natalia está cerca del borde de la carretera junto a la casa de los Ortega, yo sé que la señora Ortega hace tiempo que deseaba tener un hijo, el cual ha nacido hace poco. Visitó una clínica de fertilidad, allí le extrajeron varios óvulos los cuales fertilizaron con el semen de su marido.
-Pues bien, mi teoría es que bien pudo pasar lo siguiente: A la Sra. Ortega fraudulentamente la clínica dispuso de sus óvulos fertilizados, lo que vendieron a parejas que carecían de la posibilidad de tener hijos. De todos es sabido que desde que ha tenido a su hijo sus visitas al siquiatra son asiduas. Ella enterada de este horror y pensando en que hijos suyos y de su esposo nunca sabrían donde estarían y que vida les esperaría y sintiéndose culpable se presentó en la clínica y pidió explicaciones al Dr. Vega, este negó todo pero cuando se vio acorralado y que su fructífero negocio se hundiría y podía dar con sus huesos en la cárcel, se puso violento e intento callar al precio que fuera a la Sra. Ortega. Esta luchó con él y como pudo agarró lo que encontró a mano que resultó ser una especie de cuchillo y presa de una locura irrefrenable lo clavó una y otra vez en el cuerpo del Dr. Vega.

-Cuando salió poco a poco de aquella locura y tomo conciencia de lo que había hecho, salió y se encaminó hasta su casa bordeando la carretera pasó junto a la casa de la Sra. Natalia fue allí donde se dio cuenta de que llevaba todavía el arma en la mano y que algunas de sus ropas estaban ensangrentadas. Sin saber que hacer tiró el arma y se quitó las ropas manchadas. Ya en su jardín encontró unas ropas viejas en el cuarto de las herramientas, las que se puso para entrar en casa y que su marido no se diera cuenta de su ausencia.
-Me parece muy poco probable para este villorrio teoría tan cruenta, dijo Antonio, pero bueno, ya tenemos la primera.
-Tomemos el café o se enfriara y pensemos un rato en la teoría de Lucia.
-Dices que la Sra. Ortega entregó óvulos fecundados a la clínica y que esta la engañó vendiéndolos y comercio con ellos, esto es casi de ciencia ficción opinó Antonio.
-¿Alguien quiere una copa? –Dijo Sara- mientras su cabeza no de jaba de buscar una buena teoría.
Además tu teoría no se sostiene, nadie es tan tonto como para abandonar ropas y arma tan cerca de su casa y quizá llenas de huellas- ahora fue Lucas el que intervino.
Lucia balbuceó y después dijo, bueno pues vamos a escuchar como son las vuestras.
Tomaron la copa y parecía que la reunión se animaba un poco más.
-¿Cómo va vuestra historia? – preguntó Raúl el cual había introducido la cabeza por una de las ventanas, solo vengo a deciros que también han encontrado junto con las ropas y el arma unas maderas rotas y pintadas y de varios colores.
-¡Vaya! Nuevos datos- dijo Sara- ¿servirán para algo?
-Lucas empezó a hablar. Pensar en Arturo el de las caravanas, hace tiempo tuvo cuentas con la justicia, aquí nunca se supo lo que pasó pero siempre que paso a su lado no se lo que tiene que me da escalofríos. Todo el mundo sabe que es un avaro y que también se dedica a prestar dinero a un alto interés. Hace poco se rumoreó que había negado un préstamo a un granjero que lo necesitaba urgentemente para el pago de una hipoteca. Además otras veces a negado prestamos hasta para el entierro a familiares que en esos momentos pasaban apuros y no tenían dinero para dar sepultura a sus seres queridos.
-¡Bueno! Ahora mi teoría Mauro al que negó unos pocos dólares y por eso perdió su finca, la otra noche aprovechó que Arturo estaba en la cantina y entró en su local para robar o para darle un escarmiento rompiendo alguna de las autocaravanas que estaban allí en venta.
-Pero no calculó bien y Arturo llegó. Mauro no se inquietó demasiado pues Arturo venia bebido y no reparó en él, pero su sorpresa fue mayúscula cuando vio arrastraba a la fuerza a una mujer, cuando descubrió de quien se trataba se le heló la sangre. ¡Era la hija de Mauro!. La maltrataba y con voz de borracho decía palabras soeces que Mauro no podía descifrar.
Mauro se acerco sigilosamente y entonces escucho a su hija llorando mientras Arturo la cogía por el pelo y la decía que se cobraría en ella todos los créditos que los malditos granjeros no le habían pagado. Sigilosamente miro alrededor buscando cualquier arma con la que defender a su hija pero no encontró nada , tanteó en la pared y al cabo de un rato dio con unas maderas que sobresalían, pues la barraca donde Arturo tiene su negocio es casi una ruina.
Con las maderas en la mano caminó hacía la pareja y descargó un golpe con todas sus fuerzas en la cabeza del borracho, este cayó al suelo con un gruñido no muy sonoro. Cogió a su hija por el hombro y la atrajo hacía él, al momento los dos se pusieron a llorar abrazados.
No se dieron cuenta de que Arturo se levantaba y llevaba en su mano un arma cuando quisieron darse cuenta ya le tenían encima, como pudo esquivó el envite que le propinaba pero se tambaleó y cayó al suelo. Cuando Mauro se levantó no podía creer lo que veía, su hija clavaba una y otra vez en el cuerpo de Arturo.
Como loco tiró de su hija y salieron del local, no sabían por donde iban ni lo que harían. Cuando llevaban andando un rato se dieron cuenta de que la muchacha llevaba sangre en las ropas y todavía sostenía el arma, también él en su mano sostenía una madera.
Estaban desorientados, cerca se veía una casa, pero ellos se encontraban en una pequeña arboleda y anochecía. Mauro de quitó la chaqueta y tirando con todas sus fuerzas de la blusa manchada de su hija la intercambió. Luego limpio el arma con la blusa y sin saber muy bien lo que hacía se deshizo de las dos , junto con las maderas que todavía conservaba.
-¡Vaya historia más rebuscada! Puedo dar por bueno que Arturo no es una buena persona y que hay muchos que le desearían su muerte, pero de ahí a matarle- dijo Sara-
-Además otra vez las ropas los incriminan, no van a ser tan tontos como dejarlas como prueba – Adujo Lucas

CONTINUARA.....

LA AUTORA

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