lunes, 29 de abril de 2013

TE ELEGIRÍA A TI








Era una tarde calurosa de finales de Junio, una muchacha rubia no muy alta y delgada  apartó una silla que la molestaba para poder acceder a la mesa donde la esperaban sus amigas, mesa junto a la pista de baile de una discoteca-jardín en el centro de una gran ciudad.

Mientras la muchacha se apuraba por llegar con sus  amigas no se apercibió que unos ojos verdes seguían sus movimientos con gran atención…se trataba de un joven de la misma  edad  de estatura mediana, delgado,  ligeramente musculoso,  de cara agradable y preciosos ojos que algunas veces eran verdes intensos y otras mutaban a miel con ligeros toques verdosos. El siguió mirando a la muchacha cuando se sentó en su silla y la admiró con la tranquilidad de no ser observado por nadie.

Todo lo que vio de ella le gustó, su cabello teñido era tan rubio que al sol parecía blanco, en contraste su piel estaba  muy broceada por el sol, su cara sin ser bella era muy agradable y sus   ojos no muy grandes  eran muy vivaces y expresivos.. . Bajó un poco su mirada y la fijó en el  vestido azul claro ligeramente ajustado con gran escote,  que dejaba ver parte del de los senos de la muchacha, estos eran firmes y turgentes y de justa medida. Por su espalda corrió un escalofrío y su joven cuerpo respondió a la llamada que recibía desde donde se encontraba ella.

En aquel mismo momento decidió que haría hasta lo imposible, para que ella llegara a ser suya.

La suerte estuvo de su parte, resuelto decidió sacarla a bailar, pero lo que no sabía es que ella no tenía ninguna gana de hacerlo, pero un fastidioso rayo de sol la estaba molestando y como pronto se retiraría, cuando él muy decidido y amable decidió invitarla a bailar, la muchacha en un impulso salió  a la pista de baile con él.   Más tarde volvería  con sus amigas cuando el sol declinara.

Pero aquella tarde fue mágica, desde que se tomaron de las manos  sus jóvenes cuerpos sintieron algo muy especial, se acoplaban al sonido de la melodía y se atraían como un imán, parecía como si se hubieran estado esperando el uno  al otro, se complementaban en todo  y pronto dejaron de notar que  las melodías terminaban y se sucedían . Su conversación se  prolongaba  sin darse cuenta de lo que ocurría a su alrededor. Puede decirse que este amor fue un flechazo

 Así fue como comenzó una historia de amor que duró 43 años y que aun, sigue ya que hasta que yo muera y mas allá nunca acabará.

No hay nada más amargo y triste que saber que te perdí.

       

2 comentarios:

MARIA JESUS dijo...

Chapo Carmen es precioso. Cuando mas se echan de menos las cosas es cuando ya no se tienen. Me alegra saber de ti, espero te encuentres mejor , pero mas mejor te espero leer aún. Un beso.

RA dijo...

Has conseguido que pase de una sonrisa a una lágrima en tan solo unos párrafos, eres una artista de la palabra...
Besitos

LA AUTORA

LA AUTORA