domingo, 13 de diciembre de 2015

CUENTO DE NAVIDAD -- LA MULA DE BELÉN


Todos sabemos lo que es una mula, ¿ o no? la mula es un animal cuyos padres son una yegua y un asno o burro. Animal noble y trabajador.
Hace mucho tiempo... Bueno exactamente 2015 años, una mula sencilla sin nada especial, se afanaba junto con su amo para hacer día a día las penosas tareas del campo, trajinaba de un lado para otro por toda clase de caminos,  unas veces demasiado largos, y otros sinuosos, muy empinados...  y siempre cargada con grandes pesos.

Pero su amo algunas veces la ataba y durante muchas horas tenia que dar vueltas y más vueltas en el molino para sacar agua del arroyo que por allí pasaba, agua que se almacenaba en un aljibe para regar los campos o beber, esta labor era muy cansada y aburrida, el pobre animal atado a esa eterna rueda veía caer la tarde y deseaba que llegara la noche para que su dueño la desenganchara y pudiera descansar en el establo

La mula no estaba sola en  el establo
Todas las noches cuando su amo la encerraba allí,  temiendo hacer ruido y despertar al buey solía ponerse a dos patas y despacio avanzaba sigilosamente, poniendo primero  una pezuña y luego,la otra, procurando no perder el equilibrio, y haciendo de su figura un baile muy gracioso. Parecía que viniera de pasar una noche en la cantina.
El buey malhumorado y refunfuñón, no lo era tanto,  eso era lo que parecía, se hacía el dormido cuando veía entrar a la mula de esa forma tan graciosa.  Tenia que reprimir las risa cuando la veía  y más de una vez había esperado verla caer para reírse a carcajadas. No obstante se hacía el dormido y dejaba espacio tras él porque sabía que la mula se acurrucaría allí.
La mula costumbrada a los grandes espacios por los que transcurría su vida durante el día sentía miedo... el crujir de las paredes medio derruidas, el ulular de viento y el frío hacían que pese al mal humor del buey, ella se acurrucara siempre  tras de él y en los días en que temblaba de frío pegaba su cuerpo a él y sentía su calor y su respiración ardiente que la calentaba y la hacía dormir tranquila.

Pero una noche de Diciembre de intenso frío,mientras la mula y el buey dormían, unos ruidos los despertaron, la mula sintió mucho miedo y aún se apretó más al cuerpo del buey, la oscuridad que reinaba otras noches había desaparecido y ahora una luz intensa que no sabía de donde salía alumbraba todo el establo.
Allí se encontraban un hombre y una mujer y parecía que la mujer no se encontraba bien, ya que el hombre amontono unas pajas y suavemente tumbó a la mujer.

La mula y el buey desde un rincón miraban atónitos la escena, la mujer se quejaba y el marido la consolaba con dulce palabras, después de un largo rato, desde su rincón escucharon el llanto de un niño.
Despacito la mula se fue acercando sigilosamente hasta aquellos que habían irrumpido en el establo y lo que vio la hizo asombrarse.  Allí entre pajas. se encontraba un precioso niño recién nacido en el regazo de su madre, toda la escena irradiaba una luz especial, luz  que la mula solo había visto en los hermosos días de primavera.

Pero pronto se dio cuenta que el niño no tenia ropa y él y su madre temblaban de frío.

Pensó en el buey que todavía se encontraba en el rincón, fue hacía donde se encontraba tumbado y con su morro le fue dando empujones para que se levantara, el buey recelaba y no quería,  pero la mula, cada vez más decidida, se  tuvo que emplear a fondo para mover a la mole que era el buey, y a cabezazos, empujándole cada vez más rápido consiguió que el buey se acercara.

Así llegaron los dos hasta la madre y el niño y la mula dejó al buey a un lado de ellos y ella se puso al otro, con eso procurarían calor al recién nacido y a su madre.

Al poco el establo se empezó a llenar, los pastores de la zona guiados por una estrella,caían maravillados ante aquel niño

Él los sonreía y los dos animales orgullosos, tumbados a su lado resoplaban más y más para que el niño no sintiera frío,

¡Ya es Navidad! ¡El Niño Dios ha nacido! ¡Alegraos!

sábado, 5 de diciembre de 2015

NAVIDAD 2015



Otro año ha pasado, es verdad que no ha sido tan prospero y feliz como hubiéramos querido, pero al menos con sus muchas dificultades hemos podido ir arrancando las paginas del calendario y aquí seguimos empeñados en que ellas no logren vencernos.

Aprovechemos estas fiestas tan arraigadas, que año a año van perdiendo más su verdadero significado,  para tomar impulso, y lograr imponernos a estos contratiempos que se empeñan en ponernos difícil el que seamos felices.



Tomemos lo positivo y junto con nuestra familia y amigos celebremos estas fiestas. Unamos nuestras buenas vibraciones para que el año que entra podamos llegar a ser más felices.

Os deseo a todos que paséis la Navidad junto con vuestras familias con PAZ, SALUD Y AMOR

viernes, 28 de agosto de 2015

LA RANITA AVENTURERA


La ranita Dorotea se encontraba sobre una gran piedra que sobresalía del torrente del arroyuelo que por allí pasaba, Dorotea estaba aburrida... todo el día lo pasaba saltando de piedra en piedra croando y esperando que ingenuos insectos estuvieran a su alcance para llenar su tripita.

 Ella quería una vida mas divertida, su amigo el arroyuelo que hasta llegar a donde ella se encontraba, pasaba por muchos lugares, le había contado muchas cosas que en su transcurso había visto y  Dorotea pensaba que por eso él siempre estaba alegre,y aún siendo un pequeño arroyo... saltaba por encima de las piedras como si fuera un gran río caudaloso con brío, sonoro y cantarín...,mientras, ella soñaba llegar un día a ser  tan feliz como su amigo.


El día era esplendido y su tranquilidad se vio interrumpida por voces de excursionistas, algunas de esas voces se alejaron, pero una joven pareja con un bebe en sus brazos se acercaron al arroyo y entre risas y caricias sentaron al bebe cerca de su agua.
El pequeño reía y balbuceaba alegre y no paraba de emitir palabras ininteligibles para los demás, pero eso al él no parecía importarle, pues seguía con su alegre charla, miraba a su alrededor y  quería coger todo lo que se hallaba a su alcance. Dorotea le observaba, y disimuladamente saltaba hacía la piedra más cercana al bebe. Quería escuchar lo que niño decía, ya que que parecía divertido por lo feliz que se le veía, el niño reparó en Dorotea y extendió su brazo para darle alcance, pero su pequeño cuerpo fue a dar de bruces sobre el agua encima de Dorotea.
Dorotea sintió que le aplastaban e intento dar un salto pero no pudo, el bebe estaba encima de ella y ella no podía escapar saltando.
Los padres del niño corrieron a socorrer al pequeño, lo levantaron y con él también a Dorotea, la ranita solo pudo dar un pequeño salto e introducirse por el cuello dentro de la ropa del niño, al hacerlo sintió la piel tibia y suave del bebe, se sintió muy bien, pero el pequeño al sentir a la intrusa empezó a retorcerse y a reír,sentía muchas cosquillas con los movimientos de la ranita.

Sentaron al pequeño en su sillita dentro del coche y este arranco, llevando de pasajero a  Dorotea.
Así comenzó el viaje que tanto había soñado, Al principio se sintió mareada y sofocada, nunca había subido a un coche y además le faltaba el frescor del agua corriendo por su cuerpo, pero la tibieza de la fina piel del bebé la hacía sentir bien,

Dorotea no se atrevía a moverse ya que un ligero movimiento de ella provocaba cosquillas y el niño soltaba grandes carcajadas y movimientos bruscos que a los papas podía hacerlos sospechar de que algo raro pasaba.
Por fin después de un trayecto que a Dorotea se le hizo muy largo llegaron a una pequeña casita con un jardín lleno de plantas y césped, todo esto la ranita lo vio por una pequeña rendija de la ropa del pequeñin.
El papá se acercó al niño y lo saco de su sillita y tanto lo abrazó y beso que Dorotea pensó que iba a morir aplastada.
Llegaron a casa
-Ahora mismo me llevo al niño al baño, esta muy sucio y tiene que cenar
-Vale mientras preparo la cena
El papá llevo al bebé al baño y empezó a desnudarle, Dorotea metida entre sus ropas procuraba no moverse mucho y escapar entre las ropas que el papá iba despojando a su niño,
De un salto huyó hasta el agua de la bañera y  buscó el amparo entre  muñecos que ya flotaban allí.
-Al agua patos -dijo papá
El niño una vez en el agua cogió los juguetes para  jugar con ellos. Cuando le tocó el turno a Dorotea, sintió como la alzaban por el aire dándole volteretas para luego caer en picado en el agua.

El bebé reía y buscaba por el fondo a Dorotea y una y otra vez repetía lo mismo

Dorotea ya empezaba a marearse cuando por fin el papá sacó al niño del agua y la rana quedó a la expectativa de qué haría más tarde. La ocasión se presento cuando el papá se descuidó buscando la colonia ,  de un salto volvió a meterse entre las ropas del bebé. Este al notar en su cuerpo a la ranita empezó a reír, sentía cosquillas, pero pronto Dorotea consiguió quedar completamente quieta y el niño aún cuando sentía el cuerpo frío del animalito, no volvió a moverse
- Ahora a dormir
El papá llevo al niño a la cunita y allí le dejó después de hablarle con dulces palabras y estrujarle entre sus brazos.
Dorotea comprendió que ya no corría peligro y salió de  entre las ropas del niño, pero este la cogió y al momento se quedo dormido agarrado a Dorotea.


Los días fueron pasando y el niño y Dorotea eran inseparables, esto a la ranita la hacia disfrutar mucho pero también se sentía nerviosa alternando sus momentos de inmovilidad absoluta para no ser descubierta con los juegos de su nuevo amigo.Tuvo que aprender meditación transcendental y así poder llevar su doble vida.

Cada día para ella era una aventura, saliendo en coche, y viendo el mundo que tanto había añorado conocer cuanto se encontraba en su piedra sobre el río. Siempre escondida entre las ropas de su amigo y siempre acompañando a la familia.



El el niño nunca se separaba de ella, la llevaba a todos lados, siempre juntos y aunque por su edad se supone que no podía comprender a Dorotea  tan variable unas veces tan divertida con sus saltos y otras inmóvil junto a los demás juguetes, parecía saber que él debía ayudar a la rana para que sus papás no la separaran de él.




Y así Dorotea encontró un amigo, ya no estaba sola y podía compartir todas las horas del día y luego de noche dormir acurrucada junto a él sintiendo el suave roce de su mano.




viernes, 3 de abril de 2015

FRÍO EN EL CORAZÓN



Solo un ojo pudo abrir, el otro se resistía, durante sus horas de sueño se le había quedado pegado, pensó en sacar una mano de entre las mantas para solucionar lo de su ojo, pero el frío que notaba en la cara le sugería que no lo hiciera, con solo un ojo su mirada recorrió la habitación... Estaba desordenada, parecía una tienda de saldos un sábado por la tarde, después de haber pasado hordas de compradores compulsivos y desenfrenados. Tras pensar un rato se decidió a salir de entre aquellas ropas que le aislaban del frío y del mundo que le esperaba cuando las retirara.
Se sentó en el borde de la cama mirando ensimismada aquellas horrendas zapatillas, metió en ellas sus pies y pensó que al menos eran confortables, alargó el brazo para llegar hasta la bata, se la puso y también reparó en lo antigua y vieja que estaba, ya no podía apreciar de que color fue un día.

10,30 de la mañana de un domingo que prometía ser largo...muy largo.
Se hizo un café caliente y muy cargado y con la taza en las manos anduvo sin rumbo por toda la casa vacía, abrió y cerró puertas, entró en todas y cada una de las habitaciones, mirando allí y allá y rozando algunos objetos suavemente con sus dedos, objetos que en otro momento fueron importantes para algún miembro de la familia y que ahora resistían al paso del tiempo sin que nadie reparara en ellos y solo servían para acumular el polvo que se posaba en ellos.
El reloj parecía también parado en el tiempo, lo miraba y los minutos se hacían eternos, se terminó su café mirando por las ventana, afuera el clima era horrible, frió intenso, cielo plomizo y el viento que sacudía fuerte arrastrando con si cuanto salía a su paso.
La cabeza le dolía ¿Sería otra vez la tensión arterial? últimamente la presión parecía un caballo desbocado, siempre la tenía alta y los dolores de cabeza eran constantes, en sus oídos resonaban los consejos de su medico " no lo olvide la sal es un veneno para usted, nada de sal"
Así era su vida de insípida, días largos, vacíos... noches cortas... insomnio, dolores, enfermedades y soledad.
Entró en el cuarto de estar y con el pie retiro la estufa, los zapatos y cables que le impedían el paso, el cuarto era una metáfora de su vida, nada estaba en su lugar.la decadencia imperaba en él.
Y así se sentía ella, en caída libre y tan decadente como el lugar en donde pasaba la mayoría de las horas.
Se decidió ¡ hasta aquí he llegado! bajó un poco la persiana para quedar aún  más en penumbra, y como un ladrón abrió despacio y con aprensión el primer cajón de un  mueble, nerviosa y temblorosa miró el contenido, al fondo y tapados con algunas prendas se encontraban unos pequeños paquetes que había ido acumulando.Cuando los compró uno a uno, no lo hizo con la intención que ahora tenía, pero pensó que era una muy buena idea. Podía funcionar
El domingo se le haría mucho más corto y quizá consiguiera su propósito.
Encendió el televisor y en la mesa cerca de ella puso una gran jarra de agua, se sentó y  abrió la primera bolsa, y contó las restantes.
-Creo que serán suficiente.

Lunes 11,15 de la mañana, la señora que le hacía la limpieza entró con su llave, casi desde la puerta la empezó a llamar, pero no obtuvo respuesta, cuando llego al cuarto de estar, allí la vio sentada en el sillón, como dormida, la televisión estaba puesta y nada parecía extraño, solo unas cuantas bolsas de plástico vacías desparramadas por el suelo. Se acercó para que despertara, pero con gran susto al tocarla noto que estaba fría y rígida
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Lunes 5,40 . Dos ayudantes del forense hablaban

-¿ Tu crees posible que alguien pueda suicidarse de esta forma?

-El forense calcula que por la cantidad de bolsas vacías, estuvo más de 20 horas comiendo pipas de girasol con abundante sal, unos 2 kilos, y su medico ya le había prevenido de que para ella la sal era un veneno, que su tensión le podía provocar la muerte

-Jeje, podíamos decir que ha muerto por sobredosis.

-Si, de pipas de girasol.

LA AUTORA

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