martes, 9 de junio de 2009

LA NENA DE LUTO


No había otra, la solución a sus espantosos problemas solamente acabarían si se decidía a volver con la Nena
Su cuerpo se lo estaba recordando continuamente, unas veces por la mugre y los picores que arrastraba y otras por el ruido de las tripas, hasta calambres tenía en su bajo vientre, no se acordaba del día que fue por última vez al váter ¡ Ni mierda tenia en las tripas ¡

Mas bajo no se podía llegar hasta se atrevió varias veces a estirar la mano pidiendo limosna, pero la gente estaba harta de pedigüeños ( había de todas las nacionalidades y le llevaban ventaja pues la mayoría podían mostrar brazos y piernas cercenados, amén de toda clase de deformaciones increíble con las que no podía competir) hasta para tener un sitio entre los parías del mundo había que tener suerte.

Durante horas estuvo dando vueltas y mas vueltas alderredor de su casa sin atreverse a traspasar el portal, con tantas vueltas lo único que consiguió es que tres perros tan famélicos como él le siguieran pegados a su culo ( es de suponer que el olor que manaba de él fuera demasiado atractivo para los canes) ya que ese culo no veía el agua desde que se descubrió la sopa de ajo.
Por fin soplo y metiendo su mano en el bolsillo apretó con todas su fuerzas la llave de casa y con las pocas fuerzas que le quedaban subió las escaleras de dos en dos.
Al llegar a la puerta rápidamente metió la llave y giro la cerradura, esta cedió y la puerta se abrió de par en par. Asustado dio un pequeño paso y giro la cabeza a ambos lados. Nada ni nadie parecía residir en esa casa, ni un ruido.
Ya había llegado hasta allí y no pensaba retroceder, ligero se dirigió hasta la cocina y rápidamente de abalanzó sobre el frigorífico lo abrió y metió la mano mientras miraba hacía atrás con mas miedo que vergüenza, agarro sin mirar lo primero que tocó y lo saco, ansioso y muerto de hambre ya se lo acercaba hasta la boca cuando un olor mas repelente aun del que él soltaba le hizo mandar lo mas lejos que pudo aquel asqueroso trozo de una cosa indescriptible podrida y llena de gusanos.
Todavía no se había repuesto y las piernas le temblaban mas que un flan de polvos del “Chino Mandarín “ cuando algo espantoso y a la vez cómico le hizo parar en seco la “ temblaera”.
Por el pasillo como un alma peregrinando hasta el averno apareció una figura grotesca .Al principio no la reconoció pero luego vio que esa figura era la Nena. Toda vestida de negro, desde la cabeza a los pies. Vestido, medias, e incluso velo tapándole su cabeza .
-Nena ¿Eres tu?
-Nada, ni un pío… la figura se deslizaba hacia él con una expresión en la cara que a Manolo le dio miedo.
-Nena, soy yo Manolo, Manolo tu marido, ¿No me conoces?
-Señor, Manolo era mi marido, murió. Desde entonces en esta casa no se reciben visitas. Todo aquí quedo igual que el día que mi Manolo nos dejó para siempre.
-¿Qué dices yo no he muerto? No me ves aquí.
-Señor en esta casa estamos de luto Manolo se fue.
-¡Despierta! Ya he vuelto, todo ha pasado no volveré a irme. Y diciendo eso la cogió por los hombros y la zarandeo…..
-Eh.. . Manolo ¿eres tú?
- Claro tontita
- Pero tú eres Manolo, mi Manolo.
-Siiiiiiiiiiiiii
-Pues también estoy preparada para que Manolo volviera del mas allá y del mas acá. Le conozco sé que es un sinvergüenza y podía haber liado a los del otro mundo.
-Pero no hay problema porqué ahora si que te vas a ir de verdad. Y diciendo eso saco de entre sus ropas un cuchillo jamonero de dimensiones inmensas y alzando su brazo le lanzó una larga cruzada en todo el morro para darle la puntilla ( la Nena era muy aficionada a los toros). Y otra vez tenemos a Manolo a la carrera y ahora la cosa estaba muy fea.
La Nena con instintos asesinos era mas peligrosa que una granja de cocodrilos en la bañera de casa.

No hay comentarios:

LA AUTORA

LA AUTORA