martes, 29 de octubre de 2013

EL MAR TE TRAJO A MI -8ª PARTE


Victoria apartó su vista de la pantalla del ordenador, y se fundió en sus pensamientos, hacia unas horas que había dejado que Rodrigo le pusiera el anillo de prometida y ya se lo había quitado, lo guardó en el bolsillo de su chaqueta, no podía verlo y tampoco sentirlo allí, fulgurante, en su dedo. Era un recordatorio constante de algo que no debería de hacer, casarse con Rodrigo.


Allí en su despacho pensó en su vida
 anterior a conocer a Alejandro, fue muy feliz hasta cumplir los 13 años,nunca olvidaría aquél día, era un hermoso día de primavera, de estos días que parece que la felicidad se ha posado en todos y cada uno de nosotros, que el sol es radiante y la luz blanca y energizante hace sentir por dentro algo especial parecido a la felicidad. Ella se encontraba en su habitación repasando los temas que al día siguiente se tendría que examinar.Tocaron a la puerta, pero ella no fue a abrir, sabia que su madre seria quien la abriera, escuchó una voz masculina y al poco un grito junto con el llanto de su madre, corrió escaleras abajo y vio como en la puerta se encontraban dos hombres y como uno de ellos sujetaba a su madre para que no se cayera.
La noticia fue brutal, el coche de su padre había sido arrollado por un conductor borracho, haciendo que cayera por un terraplén donde se incendió y explotó. Victoria y su madre quedaron paralizadas y muertas de dolor, su marido y padre era todo para ellas, él era vital, optimista, cariñoso y la vida sin él les parecía que nunca podría ser igual.

Después del sepelio y que todos los familiares y amigos se hubieran marchado, las dos mujeres quedaron allí, solas, mirándose la una a la otra ¿Y ahora qué? parecían decirse con la mirada. Él era todo en esa familia, su motor, su fuerza, ¿como iba a ser la vida sin él? Sabía como alegrarlas el día a día, las amaba y las
protegía. Tendrían que acostumbrarse a que él faltase, a una vida triste y muchas estrecheces económicas.

Cuando Victoria volvió al colegio se propuso ser la mejor en todo, destacar, sacar las mejores notas y   conseguir una beca para la mejor escuela de negocios del país, ya que lo ahorrado por sus padres para sus estudios en la universidad, era lo que ahora les estaba sirviendo para salir de apuros económicos.
Tres años llevaban ya sin él, cuando a su madre,todavía joven y bonita  le presentaron a un conocido y reputado médico, muy pronto se prometieron en matrimonio, la boda no tardó en producirse.
 Después de la boda se fueron a vivir a la esplendida casa de él, su madre parecía feliz, después de esos tres años sin marido y sin dinero, ahora podía darse unos caprichos que durante años había carecido.
Ella  también estaba feliz por ver a su madre, más alegre, mas dispuesta a salir y entablar nuevas amistades a viajar y por supuesto por que tuviera el cariño y la proyección de un hombre
.
Pero pronto su madre cayó enferma, al principio eran pequeños desmayos de los que se recuperaba pronto pero casi enseguida fueron a  más sufriendo una incapacidad de respirar y  obligándola casi todo el día a pasarlo en cama,
Un día su padrastro la llamó, quería hablar a solas con ella.
-Victoría, la enfermedad de tu madre va a más, tiene un problema pulmonar. una fibrosis pulmonar en un estado avanzado.
-Pero se curará verdad?
-Como te he dicho su enfermedad, está muy avanzada.
Pasaron unos meses ,Victoria se había convertido en una preciosa muchacha, muy trabajadora y responsable siempre era la que mejores notas sacaba,, sus profesores la ponían como ejemplo.

Pero con el correr de los meses, empezó a sentirse molesta con su padrastro, no le gustaba como  la miraba, eran miradas furtivas, casi imperceptibles para alguien que no fuera Victoria, se sentía espiada y empezó a  cambiar de forma de vestir, ahora ya no usaba, faldas cortas ni top que le dejaran la piel al aire, desterró los pantalones ajustados y por casa jamás se paseaba ligera de ropa, incluso en su habitación siempre estaba vestida con anchos pantalones y blusas largas, lo hacía para disimular sus ya muy evidentes encantos.
Su madre cada vez salía menos de su habitación y ella procuraba coincidir lo menos posible con su padrastro, ponía mil excusas para no estar cuando sabía que él estaría en casa.Todo el tiempo lo pasaba en la biblioteca estudiando, solo cuando él no estaba se dedicaba a estar junto a su madre.Pero empezó a recibir el acoso de él, primero fueron ligeras caricias, reteniendole la mano cuando la recibía o la despedía, luego, los besos de despedida que él la daba en la mejilla,intentaban rozar sus labios, y en algunas ocasiones había intentado frotar su cuerpo en el de ella haciendo que tenia que alcanzar algo por donde Victoria se encontraba.
Un día cuando pasó al cuarto de su madre, esta después de darla un fuerte abrazo y un beso, la puso una llave en su mano.
-Esta llave es de una taquilla en la Estación Central, hasta que he podido levantarme he ido llevando joyas y algo de dinero, también quiero que cojas las que tengo en mi tocador y te marches de aquí.
-Mamá nunca te dejare.
-No, hija debes marcharte, a mi me queda poco tiempo, pese a estar enferma, me he dado cuenta de como te mira tu padrastro. Yo creía que era un buen hombre, pero no lo es, no siempre el dinero y la fama la ganan las buenas personas, márchate hija, márchate...
Victoria lloro allí en el regazo de su madre, no se marcharía hasta que ella faltara, pero aquél maldito hombre sabría quien era ella.
Él cada día intentaba un nuevo avance pero ella, ya solo se dejaba ver por casa cuando él no estaba, Victoria salía de madrugada y se apostaba cerca de la casa a espiar, cuando su padrastro se marchaba, entonces, entraba y pasaba en la habitación de su madre todo el tiempo acompañándola, en su penosa enfermedad. Preparó todo, poco a poco, fue sacando de la casa los recuerdos de sus padres, su ropa y libros, cada día marchaba a la Estación Central e incrementaba las cosas que allí guardaba .Cuando su madre falleciera, no pasaría ni un minuto en aquella casa con aquel desgraciado.
Su madre falleció estando solas las dos,después de llorar muy desconsolada, preparo a su madre, la maquilló y la peinó, la puso uno de sus más bonitos trajes y llamó a la funeraria.
Cuando su padrastro llegó, se encontró con que ni su mujer ni Victoria se encontraban allí. ¿que podía haber pasado?.

Victoria enterró a su madre sola.

Después la vida no había sido nada fácil, cambió de ciudad y de escuela, huyendo de aquel hombre, dejó a su madre enterrada lejos de ella,perdió amigos y profesores y tuvo que iniciarse en la vida ella sola, eso la hizo mas fuerte y más dura, se propuso llegar a lo más alto y lo consiguió. Nadie ahora intentaría abusar más de ella.
¿Era por eso que su corazón nuca había sido sensible a ningún hombre, hasta que llegó Alejandro?
Fue esa mala experiencia la que la hizo reservarse y negarse al amor, ¿Entonces por qué, su corazón no dudó cuando ella se enfrentó a Alejandro. Y ahora lo comprendía, Alejandro era único, se entregaba a ella con generosidad, abriendo su corazón, mostrando bondad, cariño, brindándole su corazón y su alma, y ella lo había sentidos en sus besos.

Su teléfono volvía a sonar, miro quién era y comprobó que otra vez le llamaban del taller de alta costura
donde le estaban confeccionando el traje para su boda. Dejó que siguiera llamando y se recostó en el sofá acurrucándose.Una vez Alejandro la reprochó ser una cobarde y ahora se lo estaba reprochando ella, era verdad que  por cobardía estaba a punto de arruinar su vida casándose sin amor.Se sentía mal. la cabeza le daba vueltas, como iba a enfrentar a Rodrigo? suspiro y dijo en voz alta -Yo no soy una cobarde, por amor me enfrentaré al mundo entero, y lo primero es hablar con Rodrigo.
Rodrigo extrañado por la llamada de Victoria, esperaba impaciente en su restaurante favorito a que ella llegara, la voz de ella había sonado grave y no había querido dar explicaciones por teléfono.
Cuando Victoria llegó se levanto solicitó y apartando la silla espero a que ella tomara asiento y luego él se sentó.
-Voy a ser breve, no quiero lastimarte, pero lo he pensado mucho y es lo mejor.
-De que hablas Victoria?
-De nuestra boda, es una locura, sabes que no te amo...
-Pero sé que lo harás.
-No, no lo haré nunca porqué, mi corazón no me pertenece, amo a otro hombre con todo mi ser, he tratado de borrar ese amor, pero es tan fuerte, tan intenso, que ni yo misma podía comprender que un amor así existía .
-Pero Victoria, quién es ese hombre? Le conozco? nunca te he visto con otro.
-Si, si me has visto, Rodrigo mi corazón se quedó en el pueblo marinero, el Capitán lo tiene, es suyo, desde el primer momento que lo vi y hasta que muera.
-El Capitán... el Capitán de aquél barcucho? aquel patán insolente? de ese es de quien tú, la mujer mas deseada por todos lo hombres de tu clase esta enamorada? de ese burdo y analfabeto pescador?
-Llámale como quieras, yo sé que no es ni lo uno ni lo otro, es el ser más maravilloso que he conocido y por cobardía y por no enfrentarme con los de mi clase me prohibí ese amor, pero ya se acabó estoy decidida a cualquier cosa por vivirlo, si es que no es tarde. Me he dado cuenta de que el verdadero amor  no sabe de razas, de educación, ni de clases sociales.
-Y que hay de nuestra boda?
-No finjas Rodrigo, tu tampoco estabas muy entusiasmado con ella, solo era un capricho más de los tuyos Quedemos como amigos.
Victoria se levantó y sin mirar atrás salio de restaurante pensado que al igual que lo había dejado atras también dejaría su vida de triunfo pero insatisfactoria, banal, basada en intereses y dinero. Su vida si Alejandro todavía la quería a partir de ahora se basaría en el amor de él.  CONTINUARA,,,

1 comentario:

MARIA JESUS dijo...

Mas largos Carmen, mas largos los capitulos.... un beso.

LA AUTORA

LA AUTORA